martes, 9 de diciembre de 2008

UN CURRÍCULO OCULTO PARA LA JUVENTUD: ¿Qué es lo que quieren de mí?

Buenas tardes.

Primero haré un resumen del texto y una síntesis de las ideas más importantes y luego expondré mis reflexiones y opiniones personales. El resumen intenté que fuera corto, pero al ser un texto tan largo, no he sido capaz simplificarlo más. Quizás no tiene la cualidad de resumen. Espero que no se haga demasiado pesado.

El texto empieza poniéndonos en la situación de Matt, un adolescente de 16 años. Sus padres Peter y Lynn se enfadan con él porque no ha llegado a casa a su hora. Sus padres se dan cuenta de que el apego que Matt tenía hacia ellos, ya no lo tiene. Al mismo tiempo su madre siente una satisfacción al ver que su hijo está creciendo. Ella le recrimina su egocentrismo. Su independencia molesta y crea desconfianza. Sus padres esperan un cambio en su comportamiento, en su actitud. Su madre quiere que su hijo sea adulto ya, que coloque sus necesidades por detrás de sus compromisos. El problema es que Matt se interesa por lo que sus padres se interesan y preocupan.

Quieren que Matt cambie su forma de entender y de pensar, que transforme su conciencia.
Matt debe satisfacer diversas expectativas sobre su manera de comprender el mundo que le rodea. Peter y Lynn quieren que sea alguien en quien se puede confiar, que no abuse de sus libertades individuales, que participe en las relaciones. Al mismo tiempo quieren que sienta de manera diferente, esto es, que aprenda a identificar y compartir una parte de su vida psicológica.
Los adolescentes deben ser capaces de identificar sus motivaciones y reconocer sus conflictos emocionales. Deben ser “psicológicamente reflexivos”, con capacidad de introspección y conciencia de ellos mismos.

Sus padres quieren que Matt tenga sentido común, que pueda diferenciar entre riesgo razonable y absurdo. También quieren que tenga criterios propios, valores, ideales, creencias y principios. Matt debe ser capaz de relacionarse más allá de su bienestar individual, de diferenciar sus inclinaciones personales. Esperan que el adolescente sea capaz de mostrar cierta lealtad a las creencias con las que se identifica, sustentarse en determinados valores para dirigirse hacia el futuro que considere mejor para él o para ella y para el mundo en que se desenvuelve.
El adolescente tiene muchas exigencias mentales, sus padres quieren que cambie su mentalidad. En la infancia ocurre un cambio cualitativo en su manera de pensar, de sentir y de relacionarse socialmente. Reconocen que las personas tienen una mente propia, que tienen distintas intenciones y puntos de vista. Los niños amplían sus límites. Entre los 7 y 8 años los niños superan su relación de inmediatez con sus deseos, preferencias y habilidades. A los 10 años aproximadamente, organizan sus deseos como algo persistente en el tiempo, no como algo impulsivo. Descubren una cantidad de elementos que no guardan relación entre sí.

El texto habla del Sí mismo, una clase que conjuga propiedades de preferencia, hábito y habilidad. Existen nuevas formas de comprender los dominios que nos separan de lo físico, lo inanimado, lo social y lo introspectivo, están precedidas por una sola transformación en la mente. Los deseos ya no se agotan en un impulso de momento y pasan a pertenecer a una clase llamada yo, que progresa y que tiene necesidades y preferencias que perduran en el tiempo, que puede organizar y controlar el impulso o deseo inmediato.
La habilidad para construir un mundo concreto, puntos de vista independientes y un Yo con determinadas propiedades, proviene de una sola forma de conciencia, de un modo de comprender la realidad, "orden de complejidad de la conciencia" que trabaja con "categorías durables".

Se pretende que el adolescente sea capaz de comprender que hay una comunidad que va más allá de sus intereses individuales, el cual requiere lealtad o sentido de pertenencia.
Peter y Lynn quieren sentir que tienen una verdadera relación con su hijo, que se relacione con ellos basándose en su compresión de las preocupaciones que los invaden, relación de confianza y cuidado mutuo. Quieren que comprenda y se identifique con el punto de vista de sus padres, y para ello es necesaria una relación entre él y su postura individual. Sus deseos deben estar en un “lenguaje” que incluya la visión de sus padres.

El texto utiliza el término “co-categorías” cuando el adolescente es capaz de comprender a las personas de su entorno y relacionarse con ellas con otros criterios, lo cual es más complejo.
Se busca que el adolescente entre a participar en los espacios de regulación social y de trato justo. Necesita una forma de comprender la realidad. El adolescente debe subordinar sus intereses individuales a las necesidades y valores de sus relaciones.

Inferir es una forma de entender las co-categorías. Pensar reflexivamente requiere una diferenciación de la idea durable, pensamiento, hecho o descripción, de manera que se subordina a un criterio o campo mayor, y que logre reclinar su atención y alcanzar su propia producción. Necesita el uso del pensamiento abstracto, que la abstracción dependa del mismo criterio de organización mental según el cual, para relacionarnos con alguien, este debe ser confiable.

También es necesario que el adolescente experimente sus emociones como estados psicológicos internos, y para ello también requiere de la subordinación e integración de sí mismo. Debe identificar motivaciones interiores, conciencia de sus conflictos emocionales, cierto nivel de auto-reflexividad psicológica, que pueda comprenderse mejor. Necesita una organización mental.

Se dice de los adolescentes que tienen un bajo control del impulso, y que actúan debido a la “furia hormonal”. SI se lograra tener el orden categórico de la mente tendrían suficientes herramientas para controlar esos impulsos. Deben tener un nuevo esquema de pensamiento, capaz de relacionar simultáneamente una categoría durable con otra.

El adolescente debe tener la capacidad para construir y organizar sentidos o significados y tener una estrecha relación con las capacidades selectiva, interpretativa, ejecutiva y constructiva que los psicólogos asocian con el ego o el sí mismo. Deben ser organizadores activos de su propia experiencia.

Comprender no sólo se refiere a la cognición ya que pensar es independiente de sentir y de relacionarse socialmente. Hace falta un acoplamiento de criterios más complejos de organización de la experiencia. Se debe incluir lo afectivo, lo interpersonal y lo intrapersonal para lograr un orden de la conciencia.

· El primer criterio de organización de la experiencia se denomina criterio de elementos independientes. Por su apego a lo momentáneo, lo inmediato y lo atomístico, el pensamiento de estos niños es fantástico e ilógico, sus sentimientos son impulsivos y su sociabilidad egocéntrica.
· El segundo criterio es el de categorías durables y su evolución es latente hasta entre los siete y los diez años. La capacidad para comprender y organizar mentalmente cosas, otros y el sí mismo como portador de características o propiedades determinadas, sustenta el pensamiento lógico concreto. La categoría durable pasa de ser el sujeto a ser el objeto de su experiencia.
· El tercer criterio es el manejo co-categórico: es la capacidad para subordinar el estatus de las categorías durables a su interacción con otras categorías. Requiere del pensamiento abstracto, que los sentimientos sean vistos como estados internos y las emociones susceptibles de auto-reflexión y que la sociabilidad surja de la capacidad de lealtad y la devoción a una comunidad de personas e ideas de mayor alcance que el sí mismo.

Los distintos criterios de organización mental se suceden unos a otros, es decir, el anterior está integrado en el siguiente, así es como se relacionan entre sí. La relación es de evolución, cualitativa e incorporativa.


El texto me ha gustado bastante. No ha sido de lectura muy complicada ni pesada, en mi opinión. Creo que cuando introduzcamos el tema de la adolescencia me servirá mucho haberme leído el texto y haber hecho un resumen de las ideas.

Él ejemplo me parece muy bueno, y de hecho, al girar en torno a él durante gran parte del texto, he logrado cuadrarme en las ideas. El adolescente a medida que va creciendo va cambiando su manera de pensar, sentir y de ver las cosas. Este cambio no sólo le afecta a Matt, sino que sus padres también resultan afectados. Numerosos cambios ocurren en la vida del adolescente y debe haber buena relación entre padres e hijo para que haya una perfecta armonía. Esto muchas veces no es así, y aparecen los problemas. Se le exigen muchos cambios a los adolescentes, cambios que éste no está dispuesto a cumplir o que suponen la implicación de más personas y sus relaciones. El adolescente ya no debe ser un ente individual, tiene relaciones que cuidar.
Además tiene unas exigencias mentales que debe cumplir. Actuará con sentido común, dejando atrás los impulsos. Consigue el sentido de pertenencia, ya no es individual, pertenece a un grupo o sistema al que debe mostrar lealtad, como es la familia o el grupo de amigos. Tendrá que dejar a un lado sus intereses personales para centrarse en los intereses de sus relaciones. El ejemplo del empleo me pareció bastante útil para comprender estos conceptos.

En resumen, el niño, al pasar a la adolescencia, irá acompañado de numerosos cambios, no sólo físicos, sino mentales, que provocarán una desestabilización. Sus padres le ayudarán, pero debe ser él mismo el que luche y aprenda a comportarse como un joven adulto. Esto le supondrá muchos cambios en su actitud, comportamiento, manera de pensar y otros muchos aspectos. Supongo que estos días iremos trabajando este tema, aclarando y matizando las ideas.

Un saludo.

1 comentario:

Alejandro dijo...

...Sus padres se dan cuenta de que el apego que Matt tenía hacia ellos, ya no lo tiene...

No es un tema de “apego”, sino de diferente manera de relacionarse, de entender la relación, de no compartir las mismas expectativas acerca de cómo comportarse o comunicarse.

...El problema es que Matt se interesa por lo que sus padres se interesan y preocupan...

No exactamente. Matt se interesa más bien por sus intereses, necesidades y preocupaciones, no por las de sus padres.

...Entre los 7 y 8 años los niños superan su relación de inmediatez con sus deseos, preferencias y habilidades. A los 10 años aproximadamente, organizan sus deseos como algo persistente en el tiempo, no como algo impulsivo. Descubren una cantidad de elementos que no guardan relación entre sí...

Espero que conectes esto con lo que vimos de Secretos del Corazón.

...El texto habla del Sí mismo, una clase que conjuga propiedades de preferencia, hábito y habilidad...

Ese Sí mismo actúa como una estructura organizadora de la experiencia. Es la estructura mental, la conciencia cualitativa.

...En resumen, el niño, al pasar a la adolescencia, irá acompañado de numerosos cambios, no sólo físicos, sino mentales, que provocarán una desestabilización. Sus padres le ayudarán, pero debe ser él mismo el que luche y aprenda a comportarse como un joven adulto. Esto le supondrá muchos cambios en su actitud, comportamiento, manera de pensar y otros muchos aspectos. Supongo que estos días iremos trabajando este tema, aclarando y matizando las ideas...

El texto no sólo se centra en la adolescencia, sino en los tres órdenes de conciencia propios de la infancia, la niñez y la adolescencia. Más allá de la edad, nos estamos centrando en la diferente organización mental que tienen para dar sentido a su experiencia. Esto influye en las dimensiones cognitivas, sociales y afectivas. Espero que haya contribuido también a hacerte entender mejor la transición que estudiamos en Secretos del Corazón. Nos vamos a centrar ahora en la transición que va desde la creación de categorías hasta la etapa co-categórica y más allá. Kegan contempla 5 estadíos u órdenes de conciencia. Aquí sólo aparecen tres, de momento. Como ya has visto el estadío co-categórico va mucho más allá de la mera adquisición de un pensamiento abstracto. Profundizaremos en esto las próximas semanas…

Un saludo

Alejandro